Desmentimos mitos comunes sobre tomar el sol y explicamos por qué puede llevar a graves consecuencias para la salud. Aunque todos sabemos que las quemaduras solares y la excesiva radiación UV pueden provocar cáncer de piel, envejecimiento prematuro y daño ocular, todavía existen muchas ideas erróneas sobre la protección solar.
Sigue leyendo para aprender cómo evitar errores y protegerte de la manera más segura posible.
Mito #1: Necesitas usar aceite si quieres broncearte
El aceite bronceador ha sido una tendencia durante demasiado tiempo, y la verdad es que usarlo puede ser peligroso. Si bien puedes pensar que usar un aceite está ayudando a acelerar el proceso de bronceado, te está llevando rápidamente a una quemadura solar (o algo peor). Cuando tu piel está untada con aceite, este refracta la luz UV del sol en la superficie de tu piel, amplificando así la intensidad de los rayos UV (ya intensos) del sol. Deshazte del aceite y opta por un verdadero acelerador del bronceado que ayude a estimular la producción de melanina en tu piel para resaltar tu color natural cuando te expongas al sol.
Mito #2: Una quemadura se convertirá en un bronceado
Existe la idea errónea de que si te quemas con el sol, no debes preocuparte demasiado porque simplemente se convertirá en un bronceado. Sin embargo, esta es la actitud más peligrosa que existe. Las investigaciones indican que solo cinco quemaduras solares graves en tu vida aumentan el riesgo de desarrollar melanoma en un 80%. Si bien puede parecer que tu enrojecimiento se está desvaneciendo en un bronce radiante, no es un bronceado del que debas enorgullecerte porque solo se logró después de dañar y debilitar gravemente tu piel. Prepara tu piel con un optimizador del bronceado y nunca descuides la protección SPF, incluso si estás tratando de obtener algo de color.
Mito #3: Los aceites naturales proporcionan suficiente protección SPF baja
Muchos creen que ponerse aceites naturales como el aceite de coco puede proporcionar una protección SPF de bajo nivel, pero esto solo da una falsa sensación de seguridad. Los aceites naturales como el aceite de coco o el aceite de semilla de frambuesa pueden ofrecer calificaciones de SPF muy mínimas; sin embargo, esto se contrarresta completamente con el efecto refractivo que el aceite tiene sobre la luz UV (ver Mito #1). Sin ingredientes genuinos que filtren los rayos UV, los aceites de coco y similares no harán nada para proteger tu piel. Si buscas hidratación, sigue cada período de exposición al sol con un after-sun calmante y rico en antioxidantes.
Mito #4: No puedes broncearte con protector solar
La razón por la que este mito está tan extendido se debe probablemente a un malentendido del término SPF y lo que realmente representa. El SPF, o factor de protección solar, es una medida de cuánto tiempo podemos permanecer al sol sin quemarnos, según nuestro tipo de piel. Por ejemplo, si normalmente te quemarías en 10 minutos de exposición al sol sin protector solar, una aplicación de SPF 15 te daría 15 veces más tiempo antes de quemarte, o 150 minutos. El protector solar mineral no tóxico es el camino a seguir para protegerte a ti y a la naturaleza al mismo tiempo.
Mito #5: Un bronceado base te protege de las quemaduras solares
Contrario a la creencia popular, un bronceado base no te protege de las quemaduras solares. De hecho, cualquier cambio en el color de la piel es un signo de daño cutáneo. Un bronceado base puede dar una falsa sensación de seguridad, lo que lleva a las personas a pasar más tiempo al sol sin la protección adecuada. La mejor manera de prevenir las quemaduras solares es usar un protector solar de amplio espectro con un SPF de 30 o superior, buscar la sombra durante las horas pico de sol y usar ropa protectora.
Mito #6: Broncearse en interiores es más seguro que broncearse al aire libre
No lo es. De hecho, puede ser más peligroso porque las camas de bronceado emiten radiación UV concentrada, lo que puede aumentar el riesgo de cáncer de piel y envejecimiento prematuro. Según la Academia Americana de Dermatología, el bronceado en interiores antes de los 35 años aumenta el riesgo de melanoma, la forma más mortal de cáncer de piel, en un 59%. Es importante evitar el bronceado en interiores y optar por alternativas más seguras, como los productos autobronceadores.
Mito #7: El protector solar bloquea la absorción de vitamina D
Si bien es cierto que el protector solar puede bloquear parte de la absorción de vitamina D, no es una cantidad significativa. La mayoría de las personas pueden obtener suficiente vitamina D de una dieta saludable y unos pocos minutos de exposición al sol cada día. Es importante usar protector solar para proteger tu piel de los efectos dañinos de la radiación UV, que pueden causar cáncer de piel, envejecimiento prematuro y otros daños en la piel.
Mito #8: Las personas de piel oscura no necesitan protector solar
Todas las personas, independientemente de su color de piel, deben usar protector solar para proteger su piel de los efectos dañinos de la radiación UV. Si bien las personas con piel más oscura tienen más melanina, lo que proporciona cierta protección natural contra el sol, aún corren el riesgo de sufrir daños en la piel y cáncer de piel. Es importante usar un protector solar de amplio espectro con un SPF de 30 o superior, buscar la sombra durante las horas pico de sol y usar ropa protectora.
Mito #9: No puedes quemarte en un día nublado
Las nubes no bloquean toda la radiación UV del sol, por lo que todavía es posible quemarse en un día nublado. Hasta el 80% de los rayos UV del sol pueden penetrar las nubes. Es importante usar un protector solar de amplio espectro con un SPF de 30 o superior, buscar la sombra durante las horas pico de sol y usar ropa protectora, incluso en días nublados.
De hecho, la protección solar es crucial para mantener una piel sana y evitar el riesgo de cáncer de piel y envejecimiento prematuro. No caigas en los mitos comunes sobre tomar el sol y broncearse. En su lugar, usa un protector solar mineral de amplio espectro con un SPF de 30 o superior, busca la sombra durante las horas pico de sol y usa ropa protectora.